Escándalo del backdating de opciones explicado
El escándalo del backdating de opciones a mediados de los 2000 permitió a altos ejecutivos evadir impuestos y a las empresas contabilizar las opciones como deducción fiscal. Estudios destaparon el escándalo, lo que derivó en multas, la reexpresión de resultados y pérdidas de empleo. Se establecieron disposiciones contables para restaurar la confianza.
Fundamentos
Más de 50 altos directivos y consejeros delegados de distintas empresas dimitieron debido a una investigación de la Securities and Exchange Commission en la mitad de los años 2000, afectando una amplia gama de sectores, incluidas cadenas de restaurantes, agencias de reclutamiento, constructoras, sanidad y tecnología. El escándalo implicó a empresas de alto perfil como Apple, UnitedHealth Group, Broadcom, Staples, The Cheesecake Factory, KB Home, Monster, Brocade Communications Systems, Vitesse Semiconductor y varias firmas tecnológicas menos conocidas.
Escándalo de backdating de opciones
La laguna de la normativa contable
Los orígenes del escándalo del backdating de opciones se remontan a 1972, cuando una norma contable permitía a las empresas evitar registrar la compensación ejecutiva como gasto si las opciones sobre acciones se concedían al precio de mercado el día de la concesión, conocido como concesión 'at-the-money'. Esta laguna permitió a las empresas otorgar paquetes de compensación elevados a altos directivos sin informar a los accionistas.
La enmienda del código fiscal
En 1993, una enmienda al código fiscal creó un incentivo para que ejecutivos y empleadores incurrieran en actividades ilegales. La compensación superior a 1 millón de dólares se consideraba irrazonable y no era deducible, salvo la compensación basada en desempeño, que incluía las opciones 'at-the-money' que dependían de la apreciación del precio de las acciones.
Selección retroactiva
Los altos directivos descubrieron que, al seleccionar retroactivamente una fecha con un precio de negociación bajo como la fecha de concesión, podían conseguir opciones 'in-the-money' y beneficios inmediatos. Esto les permitía evadir impuestos, ya que las ganancias de capital tributan a una tasa inferior a la renta ordinaria, y también permitía a sus empleadores reclamar las opciones como deducción fiscal corporativa. Esta práctica engañosa se volvió tan generalizada que algunos investigadores estiman que el 10 por ciento de las concesiones de acciones a nivel nacional se emitieron bajo pretensiones.
Exponiendo el escándalo
Los estudios académicos desempeñaron un papel crucial en la detección del escándalo del backdating. El primer estudio, realizado en 1995 por un profesor de la Universidad de Nueva York, analizó datos de concesión de opciones hechos públicos por la SEC. Publicado en 1997, el estudio reveló un patrón sospechoso de concesiones de opciones altamente rentables que coincidían con precios de acciones bajos. Estudios posteriores de otros profesores confirmaron que los otorgantes debían poseer conocimiento adelantado de los precios. El escándalo fue finalmente expuesto mediante una historia ganadora del Premio Pulitzer publicada en The Wall Street Journal.
Se produjeron consecuencias: las empresas reexpresaron sus resultados, pagaron multas y los ejecutivos perdieron sus empleos y credibilidad. Según la SEC, los inversores sufrieron pérdidas superiores a 10.000 millones de dólares debido a la caída de los precios de las acciones y a las prácticas ilícitas de compensación.
Conclusión
Participar en el uso de información privilegiada explotando conocimiento anticipado de los precios de las acciones es deshonesto y socava la confianza. Para abordar este problema, en la primera década de los 2000 se introdujeron disposiciones contables que exigieron a las empresas informar puntualmente las concesiones de opciones y tratarlas como gastos, reduciendo la probabilidad de incidentes de backdating.