¿Qué es la Autoridad Monetaria de Hong Kong (HKMA)?
En 1993 se instituyó la Autoridad Monetaria de Hong Kong (HKMA) con el propósito de controlar la inflación y mantener la estabilidad tanto del dólar de Hong Kong (HKD) como del sector bancario mediante sus políticas monetarias. Una de las estrategias fundamentales que emplea la HKMA consiste en anclar el dólar de Hong Kong al dólar estadounidense, una medida diseñada para asegurar la estabilidad del valor del HKD.
Conceptos básicos
Hong Kong, un centro financiero clave para la República Popular de China, sirve como base para las operaciones de corporaciones multinacionales. Como Región Administrativa Especial de China, Hong Kong conserva autonomía y cuenta con una moneda propia. Su PIB nominal anual superó los 365.000 millones de dólares en 2019.
En materia financiera, la HKMA funciona de facto como el banco central de este territorio. Además, la HKMA gestiona un fondo soberano denominado Hong Kong Monetary Authority Investment Portfolio. En la Reunión de Ejecutivos de Bancos Centrales de Asia-Pacífico Oriental, la HKMA ocupa una plaza junto al Reserve Bank of Australia, the People's Bank of China, the Bank of Japan y otros siete bancos centrales.
Responsabilidades de la HKMA
El núcleo de las funciones de la HKMA es su papel decisivo en sostener la estabilidad de la moneda. Esto se logra mediante el mecanismo de tipo de cambio vinculado, calibrado para garantizar una alineación estable entre el dólar de Hong Kong (HKD) y el dólar estadounidense (USD). Esta configuración de tipo fijo mantiene el equilibrio dentro de un estrecho margen, permitiendo que los bancos emisores de HKD introduzcan nuevos billetes únicamente cuando se deposita una suma equivalente en dólares estadounidenses ante el organismo supervisor. En este sistema calibrado, las fluctuaciones del tipo de cambio se limitan a una banda predeterminada. Un rasgo notable de las operaciones de la HKMA son sus colosales reservas de divisas en relación con el tamaño de su economía.
La administración gestiona activamente el Exchange Fund, cuyo objetivo principal es influir en la valoración de la moneda de Hong Kong, ya sea de forma directa o indirecta. Más allá de eso, el fondo actúa como salvaguarda para la estabilidad y coherencia de los marcos financieros y monetarios del territorio, reforzando así la posición de Hong Kong como centro financiero global.
Con la responsabilidad de preservar la solidez e integridad del sistema financiero, incluido el sector bancario, la HKMA emplea la estrategia clave de adquirir HKD para sostener la paridad del dólar dentro del rango establecido.
Un resultado destacable del esquema de tipo fijo, observado hasta 2021, fue la creación de un entorno de tipos de interés bajos en Hong Kong. Este entorno impulsó el crecimiento económico y la inversión. Sin embargo, de forma paralela, el prolongado escenario de bajos tipos de interés provocó un aumento sin precedentes en los precios de la vivienda, planteando desafíos de accesibilidad en la región.
Conclusión
La Autoridad Monetaria de Hong Kong, creada en 1993, gestiona con diligencia la inflación y vela por la estabilidad del dólar de Hong Kong y del sector financiero. Su estrategia principal consiste en anclar el HKD al dólar estadounidense para mantener una valoración estable. La HKMA actúa como un banco central efectivo, administra un fondo soberano y participa en la Reunión de Ejecutivos de Bancos Centrales de Asia-Pacífico Oriental.
En el centro de su labor, la HKMA preserva la estabilidad cambiaria mediante un sistema de tipo de cambio vinculado. Mantiene el equilibrio y dispone de reservas de divisas significativas. La administración gestiona el Exchange Fund, reforzando los sistemas monetarios y la posición financiera global de Hong Kong. La compra de HKD sostiene la paridad del dólar, mientras que los tipos bajos impulsan el crecimiento pero generan presiones sobre los precios inmobiliarios. Este panorama complejo refleja la experiencia multifacética de la HKMA.