Recibos de Depósito Americanos (ADRs): Oportunidades de inversión globales
Los inversores nacionales reconocen cada vez más las ventajas de diversificar sus carteras invirtiendo en empresas extranjeras. Una vía conveniente para lograrlo son los Recibos de Depósito Americanos (ADRs). Este producto financiero, negociado en bolsas nacionales como la NYSE y Nasdaq, representa acciones de compañías extranjeras y elimina la necesidad de lidiar con mercados y monedas extranjeras.
Conceptos básicos de los ADRs
Los Recibos de Depósito Americanos, comúnmente llamados ADRs, son instrumentos financieros emitidos por bancos depositarios nacionales y negociados en bolsas de Estados Unidos. Estos instrumentos actúan como representantes de acciones de empresas extranjeras. Ofrecen una forma simplificada y conveniente para que los inversores nacionales obtengan exposición a mercados internacionales.
Bancos depositarios detrás de los ADRs
En Estados Unidos, numerosos bancos depositarios patrocinan ADRs. Entre ellos, los jugadores más grandes son Bank of New York Mellon (BNY), State Street (STT) y JPMorgan Chase (JPM). Estos bancos depositarios juegan un papel fundamental en el establecimiento y la operación de programas de recibos de depósito para empresas extranjeras. Sorprendentemente, muchos de estos bancos ofrecen servicios de emisión a las compañías de forma gratuita, lo que plantea preguntas sobre sus motivaciones y beneficios.
Mecánica de los ADRs
Cuando un banco depositario emite un ADR, esencialmente compra una cantidad equivalente de acciones en el mercado local de la compañía extranjera. Estas acciones son custodiadas por un banco custodio local en nombre del banco depositario. Posteriormente, los ADRs pueden negociarse libremente en las bolsas nacionales, igual que cualquier otra acción.
Si un recibo de depósito se cancelara, sería dado de baja del mercado estadounidense y los ADRs serían devueltos al banco depositario. Al mismo tiempo, las acciones mantenidas por el custodio local serían liberadas y regresarían al mercado extranjero.
Beneficios de emitir ADRs
Aunque los bancos depositarios realizan esfuerzos considerables para emitir nuevos ADRs, sus beneficios tangibles no provienen directamente de las empresas extranjeras. En cambio, estos bancos obtienen ingresos cuando los ADRs se venden en el mercado. Como en cualquier operación, los bancos depositarios ganan comisiones por estas transacciones.
Además, los bancos depositarios suelen deducir tarifas de los dividendos pagaderos a los inversores que poseen ADRs. También pueden repercutir a los inversores los gastos vinculados a la conversión de divisas. Es mediante estas comisiones y gastos que los bancos depositarios obtienen beneficios al emitir ADRs.
Conclusión
Los Recibos de Depósito Americanos se han consolidado como una herramienta potente para los inversores nacionales que buscan exposición a mercados internacionales. Estos instrumentos financieros, emitidos por bancos depositarios nacionales y negociados en bolsas de EE. UU., simplifican el proceso de invertir en empresas extranjeras. Aunque los bancos depositarios asumen responsabilidades significativas al emitir ADRs, sus beneficios reales se materializan cuando estos ADRs se negocian, siendo las comisiones y tarifas una parte importante de sus ingresos. A medida que los inversores diversifican sus carteras y exploran oportunidades globales, los ADRs siguen siendo una puerta de acceso valiosa y accesible a los mercados internacionales.