Significado histórico y rentabilidad de la relación oro-plata
La relación oro-plata refleja la relación de precios entre el oro y la plata. Tiene un rico contexto histórico, con fluctuaciones que se remontan a siglos. Los inversores suelen usar esta ratio para cubrir sus posiciones y obtener beneficios.
Conceptos básicos
Al adentrarse en el mundo del comercio de metales preciosos, los inversores pronto se encuentran con la relación oro-plata, una métrica fundamental en este mercado. Esta relación cuantifica el vínculo entre los precios del oro y la plata, indicando cuántas onzas de plata equivalen en valor a una onza de oro. Por ejemplo, si el oro está a $1,000 por onza y la plata a $20 por onza, la relación oro-plata es de 50:1.
Importancia histórica
La relación oro-plata es una medida consagrada por el tiempo, rastreada continuamente a lo largo de la historia. Su importancia perdurable surge de la notable correlación entre los precios del oro y la plata, con desviaciones mínimas.
Profundizando en la historia de la relación oro-plata
El recorrido histórico de la relación oro-plata revela patrones intrigantes, caracterizados por periodos de estabilidad y fluctuaciones significativas. Antes del siglo XX, esta relación se mantuvo notablemente constante, a menudo fijada por los gobiernos para preservar la estabilidad monetaria.
Fundamentos antiguos
El Imperio romano sentó las bases al fijar oficialmente la relación en 12:1. En 1305, Venecia registró una relación de 14.2:1, que se mantuvo hasta 1330 cuando cayó a 10:1. Para 1350, algunas regiones europeas vieron una relación de 9.4:1, para regresar a 12:1 en la década de 1450. Posteriormente, el gobierno de EE. UU. fijó la relación en 15:1 mediante la Coinage Act de 1792.
El cambio del siglo XX
Los cambios sustanciales comenzaron en el siglo XX. El descubrimiento de vastas reservas de plata en las Américas, junto con intervenciones gubernamentales en los precios del oro y la plata, desencadenaron una mayor volatilidad. El establecimiento por parte del presidente Roosevelt de un precio del oro de $35 por onza en 1934 marcó el inicio de una tendencia al alza en la relación, que alcanzó un máximo de 98:1 en 1939. Tras la Segunda Guerra Mundial y el acuerdo de Bretton Woods de 1944, que vinculó las tasas de cambio al precio del oro, la relación declinó gradualmente. Las décadas de 1960 y el período posterior al abandono del patrón oro a finales de la década de 1970 experimentaron más fluctuaciones. En 1991, la relación alcanzó un pico de 97.5:1, acompañado por una caída significativa del precio de la plata a menos de $4 por onza.
Un siglo en retrospectiva
A lo largo del siglo XX, la relación oro-plata promedió 47:1. En el siglo XXI, predominó la fluctuación entre 50:1 y 70:1. Una excepción notable ocurrió en 2018, cuando superó 70:1, alcanzando un ápice de 104.98:1 en 2020. Por el contrario, el punto más bajo de este siglo fue 35:1 en 2011.
Importancia de la relación oro-plata para inversores
La relación oro-plata es una herramienta vital para los inversores en metales preciosos, utilizada a menudo para cobertura y generación de beneficios. Un enfoque común consiste en cubrir una posición larga en un metal con una posición corta en el otro.
Estrategia de cobertura
Los inversores emplean esta estrategia cuando la relación está históricamente alta, anticipando un descenso. En esos casos, compran plata mientras venden simultáneamente una cantidad equivalente de oro, con el objetivo de beneficiarse del mejor desempeño de la plata respecto al oro.
Rentabilidad
La ventaja de esta estrategia radica en su independencia de que los precios del oro y la plata suban o bajen en conjunto. Siempre que la relación oro-plata se comporte según las expectativas del inversor, la estrategia resulta rentable.
Por ejemplo, considere el periodo desde finales de 2008 hasta mediados de 2011. Durante ese tiempo, la relación oro-plata cayó de alrededor de 80:1 a aproximadamente 45:1. Los precios de la plata se dispararon de $11 por onza a cerca de $30 por onza, mientras que los del oro subieron de aproximadamente $850 por onza a $1,400 por onza.
Por ejemplo, un inversor que compró 80 onzas de plata en 2008 mientras vendía en corto una onza de oro habría obtenido una ganancia de $1,520 en plata frente a una pérdida de $550 en oro, resultando en una ganancia neta de $970.
Conclusión
La relación oro-plata sirve como un indicador clave en el mundo de los metales preciosos. Sus raíces históricas se remontan a siglos, con periodos de estabilidad y fluctuaciones significativas. Los inversores vigilan de cerca esta relación, aprovechándola para cubrir sus posiciones y capitalizar oportunidades de beneficio, lo que la convierte en una herramienta valiosa en el comercio de metales preciosos.