Entendiendo los engaños financieros
Los engaños financieros implican prácticas engañosas que manipulan el rendimiento o la posición financiera de una empresa. Esto puede incluir contabilidad fraudulenta, la creación de entidades falsas o el robo de información financiera. Para reforzar los informes financieros y las auditorías corporativas, la Ley Sarbanes-Oxley se promulgó en 2002, promoviendo la transparencia y la rendición de cuentas.
Conceptos básicos
Los engaños financieros son acciones engañosas que manipulan el rendimiento o la posición financiera de una empresa. Pueden ir desde infracciones contables menores hasta esquemas de fraude a largo plazo. Estas acciones incluyen actos fraudulentos independientes, la creación de entidades ficticias o el establecimiento de esquemas Ponzi.
Cuando se descubre tal engaño, las consecuencias son severas. El precio de las acciones de la empresa se desploma, sus perspectivas futuras disminuyen y la dirección puede afrontar resultados graves. Dependiendo del alcance de los engaños, las repercusiones pueden incluir una venta masiva de acciones, quiebra, disolución, demandas de accionistas y posibles sanciones legales, incluida la prisión para los implicados.
¿Qué son los engaños financieros?
Los engaños financieros pueden clasificarse en varios tipos:
- Manipulación de la presentación de informes financieros mediante métodos agresivos, creativos o fraudulentos.
- Creación de entidades fraudulentas o uso de las mismas como fachada para actividades ilegales.
- Estafadores independientes o grupos dedicados al robo de información financiera como tarjetas de crédito o números de cuenta.
Los engaños financieros implican manipular los estados financieros para beneficio o ventaja personal. Esto puede incluir acciones como distorsionar cifras, falsear el rendimiento o engañar a las partes interesadas. Con el tiempo, han surgido numerosos casos notables en los que empresas enfrentaron consecuencias por participar en estas prácticas.
Diversos libros ofrecen ideas sobre los engaños financieros para interesados e inversores. Títulos populares incluyen:
- "Creative Cash Flow Reporting" by Charles W. Mulford.
- "The Financial Numbers Game: Detecting Creative Accounting Practices" by Charles W. Mulford.
- "Financial Shenanigans: How to Detect Accounting Gimmicks & Fraud in Financial Reports" by Howard Schilit.
Protégete de los estafadores
Ten cuidado con los estafadores, ya operen individualmente o en grupo, ya que representan una amenaza significativa. Su objetivo principal es robar información valiosa para beneficio personal. Comúnmente buscan detalles de tarjetas de crédito, números de seguridad social, información personal, números de cuentas de inversión, contraseñas, números de cuentas bancarias y más.
Los estafadores emplean diversas tácticas, como suplantar entidades legítimas mediante llamadas telefónicas, correos electrónicos o comunicación directa. También pueden usar dispositivos como "skimmers" para extraer información personal de cajeros automáticos y lectores de tarjetas en estaciones de servicio, posibilitando actividades financieras fraudulentas. Para protegerte, es crucial mantener la vigilancia y actuar con precaución al compartir información personal. Al conocer estas estafas y tomar medidas preventivas, puedes minimizar efectivamente los riesgos que representan.
Esquemas Ponzi
Las entidades fraudulentas creadas para beneficio financiero personal son otra forma de engaño financiero. Estas entidades, a menudo conocidas como esquemas Ponzi, engañan a los inversores presentando falsas oportunidades de inversión. A los primeros inversores se les paga con el dinero de inversores posteriores, creando una ilusión de éxito. Sin embargo, a medida que el esquema avanza, los rendimientos disminuyen y los estafadores desvían los fondos para su beneficio. Un ejemplo notable es el esquema de Bernie Madoff Investment Securities LLC, que defraudó a inversores por aproximadamente 65.000 millones de dólares durante 17 años. El esquema se vino abajo durante la crisis financiera de 2008-09 cuando las pérdidas se volvieron insostenibles.
Prácticas manipuladoras en la presentación de informes
Acciones agresivas, creativas y fraudulentas dirigidas a obtener ganancias financieras abundan en los engaños financieros, y pueden implicar la manipulación de los estados financieros. La presentación de activos y pasivos ofrece amplias oportunidades para dicha manipulación.
Manipulación de activos
Las empresas pueden manipular sus estados financieros inflando activos e ingresos. Al sobreestimar activos fijos, inventarios, cuentas por cobrar, gastos pagados por anticipado, equivalentes de efectivo y valores negociables, crean una impresión engañosa de su posición financiera.
La inflación de activos busca aparentar mayor solvencia y mejorar la posición patrimonial de la empresa. De modo similar, inflar los ingresos incrementa las ganancias reportadas, lo que puede elevar el precio de las acciones y, potencialmente, aumentar la compensación de la dirección.
Manipular los estados financieros de esta manera puede lograrse mediante diversas tácticas, como reconocer ingresos de forma prematura, registrar ventas a partes relacionadas, inflar cifras de ventas por bienes no entregados y reclasificar partidas del balance para crear ingresos artificiales.
Manipulación de pasivos
La manipulación de los estados financieros también puede ocurrir mediante la subestimación de gastos en la categoría de pasivos por parte de las empresas. Al reducir los gastos reportados, las empresas pueden disminuir sus pasivos en el balance y reducir los gastos en la cuenta de resultados. Esta práctica puede tener efectos similares a inflar activos, conduciendo a mayores niveles de patrimonio de los accionistas, beneficio neto y beneficio por acción. Las empresas pueden emplear esquemas avanzados, como el reporte fuera de balance mediante inversiones de propiedad activa minoritaria en subsidiarias o empresas conjuntas, para subestimar aún más los gastos. Esto les permite trasladar algunos gastos a subsidiarias o vehículos de propósito especial. Tales prácticas contables ofrecen oportunidades para engaños financieros y manipulación de informes.
Conclusión
Altos directivos que engañaron a inversores y empleados fueron condenados e ingresaron en prisión como resultado de los engaños financieros de grandes empresas estadounidenses, incluidas Enron, WorldCom y Tyco, a principios de la década de 2000. En respuesta a estos incidentes, la Ley Sarbanes-Oxley se promulgó en julio de 2002, estableciendo estándares más elevados para las empresas públicas en EE. UU. y apuntando a mejorar la detección de manipulaciones contables por parte de los auditores.